34 puso a su disposición la mitad de sus tropas y los elefantes, y le
dio orden de ejecutar cuanto había resuelto. En lo que tocaba a los
habitantes de Judea y Jerusalén,
35 debía enviar contra ellos un ejército que quebrantara y deshiciera
las fuerzas de Israel y lo que quedaba de Jerusalén hasta borrar su recuerdo
del lugar.
36 Luego establecería extranjeros en todo su territorio y repartiría
entre ellos sus tierras.